miércoles, 9 de junio de 2010

Capítulo26. Mi patria.

No me canso de escribirte, hermosa. Con tu piel tostada al sol azteca, con tus pasible oleaje de plumas y cantos de ave. ¿Cómo no escribirte, mi diosa? Si eres todo lo que me hace moverme, tu blanco espíritu y tu rojo coraje y toda esa sangre, ¡Dios! La sangre que te extraen de las entrañas los hijos tuyos bastardos ambiguos. Esos malditos que te han saqueado cuando les has dado la vida y la verde esperanza de un mañana.

De repente me nacen las ganas de arrancarte esa plaga que cual termitas te muerden impacientes y que Gaia te meza un rato para recuperarte, encantadora dama.

Para que respires de nuevo de esa infecciosa enfermedad que ahora te habita.

Si tú… jamás les has hecho nada por lo cual quejarse.

Tienen agua, comida, sombra que cobija y una sonrisa de esas que a cualquiera conforta.

Les has dado color y luz y amor y aroma.

Les has dado la cultura del águila y el nopal.

¿Y cómo te pagan?

Usando tu nombre como escoria humana. Amarrándote a palabras insulsas y estúpidas ignorando la Constitución que te rige y enamora a diario.

Y aquellos que alardean de su f a l s o poder.

Como si no cumplir la ley fuera lo suficientemente difícil como para jactarse alguna soberanía. Estúpidos, como niños de cuatro años necesitando de su mami, usando el radio como chupón y la escuadra como mamila. Si pudiera la belleza cegar sus ineptas intenciones entonces tu belleza, tu preciosa belleza cual piel de princesa… les dejaría impactados para procurarte y dormir a tu lado.

Te sonrojarías fiel para recibir a tus pródigos con los brazos abiertos y entonces arrullarles, cantarles una nana y dejarlos dormir. Para recostarte en tus laureles merecidos y sentir la brisa mojada de tus ayeres.

Tantos ayeres como desgracias.

Como subidas y bajadas, como adolescencia que vives.

¿Por qué me pongo a llorar? ¿Por qué dejo que se me corra el maquillaje al ver a tantos cochinos corruptos? A tantos que le roban a su misma gente y nos tienen secuestrados como granja de hormigas. ¿Qué vamos a hacer con el pueblo, patria? ¿En qué momento la impunidad se hizo tolerable? Y nosotros mismos te destrozamos el vestido y le mentamos la madre al ángel de la libertad.

Eres el país de las paradojas.

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Fragmento de mi nuevo libro.

4 comentarios:

  1. omg~ ¿Tú escribiste eso? LO AMO~
    Sí es así, escribes hermoso, tan, tan, profundo, felicidades,

    Ah y gracias por los ánimos, en verdad me saco una sonrisa leer eso, muchas gracias, n-n

    Seguiré leyendo tus publicaciones, un saludo para ti, :3 <3

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  2. Oh, muchas gracias, el sólo hecho que visites mi blog y te guste me alegra el día, gracias de verdad, :3

    Y sí, toco el violonchello, aunque soy principiante, pero lo amo, es un instrumento hermoso, <3 *-*

    Ah y mis escritos, la mayor parte del tiempo no son para alguien en especial, a veces sólo me llega la inspiración de la nada y escribo, n__n

    Aunque no son muy buenos, en cambio tú escribes hermoso, creo que ya lo dije, pero lo repito, en verdad me encanta *-*

    En fin, espero que te encuentres bien.
    Un salut pour vous, ♥

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  3. Magnifico prosa poetica Caro, se puede sentir tu dolor, nuestro dolor porque muchos como vos sentimos a la patria herida.
    Al mencionar que te gustaria que GAIA se meza, no pude evitar imaginarme a México con la forma de un oso hormiguero siendo baja california Sur y Norte su trompa y sobre ese oso, unos cuantos cientos de miles de molestas sanguijuelas que lo hieren y eventualmente provocan que este se sacuda con la suficiente fuerza suficiente para finalmente liberarse de tan detestables y molesto parasitos.
    Gracias por escribir. Porque si hay algo por lo cual en éste país podemos sentir un poco de esperanza en el futuro, es gracias a que aun existen jovenes comprometidos con la justicia como vos.

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