sábado, 14 de enero de 2012

Capítulo62. Insomnio.

No soy Jack y, por desgracia, mi Tyler Durden aún no se apodera de mis sueños.

Si ella puede escribir de manera tan exquisita, seguramente yo también puedo. Y puedo porque te tengo a ti, te tengo y no te tengo y por ello te escribo. Porque los dias pasan volando cuando me besas las ingles pero cuando tus pestañas no me sacuden los polvos es cuando todo pasa tan lento. Lento… lento como un caracol, babeando en mi brazo, sirviéndome de broma. 
Por más que me pesen los ojos no ceden a permanecer cerrados. Y por más que les cuento del corazón-placebo que me trago a diario, no dan cabida al sueño.Sin embargo, yo sé que podemos hacer de esto un cuento más interesante y alborotar mis hormonas con un poco de celo.
Mi amor, me estallan preguntas dentro del craneo y me palpita la sangre que quiere salir. ¿Cómo no pude darme cuenta antes? A veces te escribo y a veces le escribo a otros al mismo tiempo y luego ya no sé ni qué estoy escribiendo.
Me duelen los recodos. Me falta la fatiga diaria de comernos a medio día y de cenarnos a media noche.